lunes, agosto 15, 2016

La Ciudad Primada de Cuba de aniversario 505

La Ciudad Primada de Cuba de aniversario 505Por Margarita Piedra Cesar

Santiago de Cuba, 15 ago.— La historia no lo cuenta, pero imaginemos que el gran almirante Cristóbal Colón cuando el primero de diciembre de 1492 hondeó sus naves de la bahía de hoy ciudad de Baracoa, prendado de tanta belleza pudo exclamar, que en vez de descubrir una isla había llegado a un pedacito del paraíso terrenal.

Lo mismo seguramente habrán pensado los conquistadores españoles que el 15 de agosto de 1511, fundaron la Primera Villa de la Isla, a la que llamaron Nuestra Señora de la Asunción, complementándose ese título con el nombre de Baracoa, que era como los aborígenes llamaban a este lugar.

Baracoa se convirtió así en el segundo sitio poblacional de América y en la primera capital y obispado de la isla, condiciones que mantuvo hasta 1515, en que ambas funciones se trasladaron a Santiago de Cuba.

No obstante, la Primer Villa quedó marcada para la historia con el título de Ciudad Primada, y los más de cinco siglos transcurridos desde su fundación, reafirman el orgullo de que fuera por aquí, por Baracoa, por donde comenzara a transitar la historia de nuestra amada isla caribeña de Cuba.

Y por si fuera poco, el calendario parece que detuvo sus pasos en esta ciudad  que hoy, como entonces, continúa atrayendo a todos por sus encantos naturales, por su estructura colonial y por la nobleza de sus hijos.

Recordar a Baracoa hoy es apegarse a la historia, con sus fuertes como los de Matachín y La Punta, que sirvieron para la defensa de la Plaza; con sus viviendas de anchos portones, ventanales y techos de tejas francesas a dos aguas; con su malecón bordeando el entorno costero; con sus montañas como el Yunque y la Bella Durmiente, cargadas de leyendas y con su hermosa y limpia bahía norteña, donde un día el gran almirante fondeó sus naves al quedar prendado de tantas bellezas.

En fin, a 505 años de su fundación, es hoy una gran dama privilegiada de encantos, siempre joven y hermosa, a la cual se le besa con orgullo y con el deseo de que siga siendo por siempre la Ciudad Primada de Cuba.