miércoles, enero 22, 2014

Maceo: Invasión de Oriente a Occidente

Como la hazaña militar más importante del Siglo XIX es considerada por la historia, la invasión de Oriente a Occidente llevada a cabo por el Ejército Mambí y que tuvo su culminación el 22 de enero de 1896, hace hoy 118 años, cuando las tropas libertadoras con el Titán de Bronce Antonio Maceo al frente, entraron en Mantua, Pinar del Río, última posición de España en la región occidental de la isla.

La Columna Invasora de Maceo, con unos mil 500 mambises, partió hacia Occidente simbólicamente desde los Mangos de Baraguá el 22 de octubre de 1895, y su marcha se extendió durante 92 días, recorriendo más de dos mil kilómetros a caballo y a pie.

En este período en que se ejecutó la invasión, España tenía en Cuba un ejército de más de 250 mil soldados de tropas regulares e irregulares, al mando de 40 generales, que tenían a su disposición los más modernos armamentos de la época para tierra y mar.

Durante la Campaña Invasora el Ejército Libertador sostuvo 27 combates de importancia, y ocupó 22 poblados a lo largo de la Isla, todos con cuarteles y con dotaciones bien armadas hasta los dientes.

A su llegada a Mantua, es decir, el 23 de enero, el Titán de Bronce y sus aguerridos invasores fueron recibidos con júbilo por la población del lugar y en su Ayuntamiento, al siguiente día, se firmó un acta que dejaba constancia de esa hazaña firmada por el propio Maceo, el Alcalde y otras personalidades de ese poblado pinareño.

La invasión de Oriente a Occidente se había intentado anteriormente durante la contienda de los 10 años sin éxito, pero esta vez si pudo cumplir su propósito de extender la guerra a todo el país y destruir la base económica que sustentaba al régimen colonial en la Isla.

Lo más importante de la invasión fue, que a partir de ese momento no había duda de que el poder español tenía contado sus días en Cuba y además, determinó la sustitución como Capitán General de la Isla de Arsenio Martínez Campos, el mismo que en Mangos de Baraguá quiso persuadir al Titán de Bronce para que abandonase la guerra por la independencia porque esta no tenía porvenir.

martes, enero 21, 2014

A 90 años de la muerte de Lenin

El cubano es un pueblo agradecido y fiel a los principios de amistad y solidaridad con otros pueblos del mundo que  han tenido y tienen igual gesto con nosotros y es por eso, que cada 21 de enero en Cuba se recuerda un aniversario más de la muerte en 1924 de Vladimir Ilich Lenin, ese hombre que con toda justicia fue llamado genial conductor de la clase obrera y creador del primer estado socialista del mundo abriendo para la humanidad una nueva era.

Lenin en su tiempo, no solo supo interpretar la doctrina revolucionaria de Carlos Marx, sino que fue capaz de enriquecerla con su pensamiento y lo más importante, llevarla a la práctica con su acción.

Lenin, incluso, desafió la propia doctrina de Marx que planteaba que la Revolución Socialista Mundial debía comenzar simultáneamente por los países más desarrollados y llevó a su país, Rusia, uno de los más atrasados de entonces, a colocarse a la cabeza del movimiento revolucionario mundial, derrocando a un imperio de siglos, como el zarista, y llevando a la clase obrera y campesina al poder.

Bajo la conducción de Vladimir Ilich Lenin tuvo lugar aquella gloriosa gesta de octubre de 1917 creando un estado multinacional, la Unión Soviética que fue capaz de derrotar la agresión de 14 naciones extranjeras, incluyendo a Estados Unidos, y sobre sus cenizas reconstruir la patria de obreros y campesinos que llegó a convertirse en uno de los países más poderosos del planeta y contrapartida del imperialismo norteamericano.

El ejemplo de Lenin y de la Revolución de Octubre se hizo indetenible y otros hombres y otros pueblos abrazaron el socialismo un sistema que demostró fehacientemente que el capitalismo no era un régimen eterno y que por ley de la historia estaba llamado a desaparecer para dar paso a una sociedad superior para bienestar del hombre.

Lenin murió el 21 de enero de 1924, hace hoy 90 años, y algunos creyeron matarlo para siempre traicionando sus ideas y hacer desaparecer su gran obra que fue la Unión Soviética y el Sistema Socialista que se abría paso, sobre todo después de la Segunda Guerra Mundial.

Pero se equivocaron los que así pensaron porque hay países y hombres que han mantenido firme la doctrina de Marx y Lenin, demostrando cada vez más que el socialismo es el sistema social superior que necesita el hombre del futuro para alcanzar la plena felicidad. Convencido de que ese día llegará Lenin sonríe y espera.