sábado, agosto 18, 2012

Camilo Cienfuegos y la invasión a Occidente

El 18 de agosto de 1958 el Comandante en Jefe Fidel Castro a través de una orden militar emitida en esa fecha en la Sierra Maestra, le asignó al Comandante Camilo Cienfuegos la misión de conducir una columna guerrillera hasta la provincia de Pinar del Río, en cumplimiento del plan estratégico del Ejército Rebelde.

La columna invasora de Camilo fue denominada la Número DOS Antonio Maceo, en homenaje al Titán de Bronce, que durante la guerra independentista de 1895 había realizado la histórica hazaña de invadir el territorio pinareño con sus mambises orientales.

Según la orden militar firmada por Fidel, la Columna DOS Antonio Maceo partiría el 20 de agosto de 1958 desde El Salto, en la Sierra Maestra y su jefe, el Comandante Camilo Cienfuegos, tendría facultades para organizar unidades de combate rebeldes a lo largo del territorio.

Señala asimismo el documento que la Columna Invasora Antonio Maceo, “aunque tiene como objetivo primordial llevar la guerra liberadora hasta el occidente de la isla (…) batirá al enemigo cuántas ocasiones se presenten durante el trayecto, mientras que las armas que se ocupen serán preferentemente destinadas a las organizaciones de unidades locales”

La creación de las Columnas Invasoras DOS y OCHO, al mando de Camilo y el Che respectivamente, fueron posibles a partir de las armas capturadas y el incremento de la fuerza guerrillera durante la Ofensiva de Verano lanzada por el Ejército de la dictadura contra la Sierra Maestra y que fue derrotada a principios de agosto de 1958, tras 74 días de combates y victorias del Ejército Rebelde.

Tanto la Columna DOS, Antonio Maceo, como la OCHO, Ciro Redondo, cumplieron exitosamente la misión invasora encomendada por el Comandante en Jefe Fidel Castro.

jueves, agosto 16, 2012

Eduardo Chibás: Acusador infatigable

El 16 de agosto de 1951, hace hoy 61 años, falleció en La Habana el senador Eduardo Chibás, líder del Partido del pueblo cubano Ortodoxo, tras varios días de convalecencia de un disparo suicida que se hizo durante un programa radial al no poder demostrar el robo de fondos públicos por uno de los ministros del gobierno de entonces.

Eduardo Chibás había fundado el Partido Ortodoxo cuya consigna era “Vergüenza contra Dinero”. Fue la figura más representativa de las clases populares durante la década del cuarenta hasta su muerte y en torno a él se agruparon hombres que tenían confianza en la toma del poder por medios políticos, entre ellos el Doctor Fidel Castro Ruz.

Chibás era partidario de la nacionalización de los servicios públicos como la electricidad y la telefonía así como de los consorcios petroleros Esso, Shell y Sinclair, abogando además por la expropiación y redistribución de la tierra en manos extranjeras por lo cual se ganó el odio de vecinos imperialistas del norte.

Desde su posición de Senador por La Habana y aspirante ala Presidencia del país en las elecciones de 1952, Eduardo Chibás viajó a Estados Unidos donde declaró que de alcanzar la primera magistratura del país nacionalizaría los servicios públicos de propiedad norteamericana lo cual constituyó un hecho insólito en la historia de la política nacional.

La muerte de Eduardo Chibás el 16 de agosto de 1951 fue sin dudas, una dolorosa pérdida para el pueblo cubano y su sepelio constituyó una sentida manifestación de duelo al acompañar miles de personas su féretro hasta la Necrópolis de Colón, en la capital cubana.

61 años después de su muerte recordemos a Eduardo Chibás con estas palabras del Comandante en Jefe Fidel Castro: “Sin la presencia de Chibás, sin el civismo y  la rebeldía que despertó en la juventud cubana, el 26 de Julio no hubiera sido posible”, pues en su opinión la gesta del Moncada fue la continuación de la obra del líder ortodoxo.

lunes, agosto 13, 2012

Hermanos de sangre e ideas; Sergio y Luis

El 13 de agosto de 1957, hace exactamente 55 años, las balas asesinas de los esbirros de la dictadura batistiana troncharon las vidas en flor de los valerosos jóvenes revolucionarios pinareños, hermanos de sangre y de lucha, Sergio y Luis Saíz Montes de Oca, de 17 y 18 años de edad, respectivamente.

Los dos muchachos nacidos en San Juan y Martínez, habían sido formados por sus padres en los más hermosos ideales y sentimientos patrios, y desde muy pequeños conocieron la vida y obra de José Martí, a quien profesaban gran admiración.

Fue por ello que siendo todavía adolescentes comprendieron que la lucha era el único camino para lograr el bienestar de la Patria y ese camino fue escogido por ellos. Hay que destacar que en su etapa de estudiantes, ambos ocuparon cargos relevantes en las organizaciones estudiantiles donde se destacaron por sus principios y oratoria.

Luis, el mayor, había matriculado en 1955 la carrera de Derecho Civil en la Universidad de La Habana, mientras que Sergio había terminado sus estudios de Bachiller en Ciencias y Letras, en julio de 1957, poco antes de su muerte.

Después de los sucesos del 30 de noviembre en apoyo al desembarco de los expedicionarios del Yate Granma, Luis regresó a su pueblo natal de San Juan y Martínez, para incorporarse al Movimiento 26 de Julio y poner todo su empeño y talento en función de organizar la lucha revolucionaria en ese territorio pinareño.

Por su parte, Sergio también ingresó en las filas del Movimiento 26 de julio y junto a su hermano Luis, a quien quería y admiraba, compartió diversas acciones revolucionarias y los peligros que ellas entrañaban.

Ambos jóvenes se destacaron en la huelga de agosto llevada a cabo en el territorio pinareño. Poco después fueron apresados por las fuerzas de la tiranía y asesinados en la noche del 13 de agosto de 1957.

Con ese crimen que conmocionó a toda la población de Pinar del Río, la dictadura batistiana asesinó dos inteligencias, dos voluntades forjadas en lo más puro del pensamiento de su tiempo, para hacer de Cuba lo que es hoy: una patria libre y soberana.